La Defensoría de los Habitantes de Costa Rica informó que se está reportando un aumento en la violencia contra los miembros de la comunidad LGBTI del país, luego de las elecciones presidenciales del 4 de febrero, dominadas por un debate sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo.
A raíz de esto, la agrupación de organizaciones de sociedad civil del Frente por los Derechos Igualitarios (FDI) ha lanzado una aplicación que permitirá a las personas LGTBI+ (lesbianas, gais, bisexuales, trans, intersex, y otras) reportar los actos de discriminación y de violencia que sufran en espacios públicos y privados, de forma georeferenciada y en tiempo real.
La información que las personas ingresen está protegida a partir de varios niveles de seguridad, y por lo tanto solo el Frente para los Derechos Igualitarios podrá acceder a ella.
Esa aplicación hace posible que las personas tengan acceso a los números y vías de contacto oficiales para hacer sus denuncias personalmente ante el OIJ, la Defensoría de los Habitantes y Fuerza Pública.
La herramienta también permite que, si la persona lo desea, tenga seguimiento y asesoría para poder enfrentar estos procesos, a fin de que pueda informarse y conozca más sobre sus derechos.
La violencia contra las personas LGBTIQ abarca la violencia cometida por individuos, que pueden involucrarse en actos de intimidación, linchamiento, asalto, o acoso escolar homófobo y transfóbico, entre muchos otros.
La violencia dirigida a estas personas suele ser por su sexualidad percibida y no su sexualidad real, por lo que las personas heterosexuales también pueden ser objetivo de agresiones físicas y psicológicas que pueden llegar al asesinato.
La violencia contra las personas LGBTIQ está motivada por la homofobia, bifobia o transfobia, que muchas veces se ve alimentada por prejuicios y costumbres religiosas y culturales.1